En el debut de Diego Martínez como DT, Huracán perdió 1-0 con Atlético Tucumán en el estadio Tomás Adolfo Ducó, por la fecha 23 de la Liga Profesional, y está cada vez más comprometido. Marcelo Estigarribia convirtió el único gol para el Decano, que también tuvo el estreno de la dupla Orsi-Gómez.
Huracán cambió la cara notablemente. Redondeó un buen primer tiempo, o muy bueno, si se lo compara con lo que venía mostrando. Hizo méritos para irse al entretiempo uno o hasta dos goles arriba pero no tuvo puntería y lo pagó caro en el segundo. Con poquito, se notó la mano de Diego Martínez: equipo plantado en campo rival, y ya no más pases horizontales sin sentido, sino pases verticales sumados a constantes movimientos.
Otra novedad del DT: Juan Gauto de enganche. El juvenil tuvo que hacerse cargo de la generación de juego y ya no de ser quien rompa con su diferencial gambeta por afuera. Él pesó menos pero el Globo no fue ‘Deportivo Gauto’ y funcionó mejor como equipo. Así, generó varias situaciones de gol, algo totalmente novedoso a comparación del ciclo Battaglia.
Lo más claro fue en el tramo final del primer tiempo, y cuando Atlético Tucumán había emparejado las acciones y también tenido dos ocasiones de peligro. Matías Gómez remató y atajó Marchiori, Acevedo tomó el rebote y el Uno la volvió a sacar, y con el arco a su merced, Cóccaro le pegó al travesaño. Inmediatamente después, Acevedo sacó otro remate y el arquero se lo contuvo. Un milagro en el área.
Fue tan alto el ritmo de partido de los primeros 45 minutos, y tanta adrenalina sobre el final, que el complemento bajó unos cuantos cambios. 15 minutos debieron pasar para que haya una ocasión de gol, y fue nuevamente para el quemero. Benítez tiró un centro raso atrás que fue conectado por Acevedo, y la pelota dio en el palo, cuando Marchiori miraba vencido.
Y como dice el dicho. Los goles que no se hacen en un arco… minutos después, Marcelo Ortiz tiró un centro que superó a Novillo y Tobio y fue cabeceado a la red por Marcelo Estigarribia. Desde ahí, todo se desmadró. El Globo volvió a padecer de la presión de tener que revertir el resultado y dejó todo lo bueno hecho previamente por ir como sea para adelante. No le alcanzó.
Muchas cosas positivas en Huracán. Niveles individuales que parecen levantar, una idea de juego clara y ambiciosa, y que por momentos pudo ser ejecutada. Y todo sin dos pilares como Fattori y Hezze. El Globo esta vez sí que no mereció perder, pero los merecimientos no alcanzan, porque si la temporada terminara hoy, los de Parque Patricios estarían descendiendo.
Huracán está a cinco puntos de Banfield, Unión, Colón, Independiente y Vélez, y cada vez el margen de error es menor. En la próxima fecha visitará a Boca. Atlético Tucumán, que estaba en la línea de esos equipos, tomó aire con los tres puntos y respira. Recibirá a Gimnasia de La Plata.